Durante los primeros meses de 1978, varios futbolistas adscritos en su día a la disciplina del Real Club Deportivo Mallorca fueron subastados no una, sino hasta tres veces, como utensilios, maquinaria industrial, obras de arte, aperos de labranza o reses. España se hallaba inmersa en plena vorágine política, con su brújula apuntando hacia Europa Occidental,…