El primer trofeo conquistado por el Madrid Foot-ball Club (1902)
De Guillermo Carrizo ValcarceLa fundación del Madrid Foot-ball Club tendría lugar el día 6 de marzo de 1902. Carlos y Juan Padrós (dos empresarios de origen catalán), en unión de Julián Palacios, oficializaban la creación de la nueva asociación. En aquel momento, nadie podía sospechar que se estaban estableciendo los cimientos de un club que estaba destinado a ser el mejor del siglo XX. Apenas tres días después de este acontecimiento, la prensa se hacía eco de la noticia.
«La sociedad Madrid Foot-ball ha elegido para desempeñar los cargos de la directiva a los señores: Juan Padrós (presidente), Enrique Varela (vicepresidente), Manuel Mendía (secretario), José de Gorostizaga (tesorero); y los señores vocales Antonio Neyra, Arturo Meléndez, Álvaro Spottorno, Mario Giralt y Carlos Mertens. Todos los domingos celebran interesantes partidos a los que concurre numeroso público, sobre todo los extranjeros, que tan aficionados son a este sport. En Barcelona, Bilbao y Vigo ha tomado carta de naturaleza el foot-ball, y en Madrid parece que va aclimatándose esta afición. La sociedad Madrid Foot-ball Club celebró el domingo un partido, no obstante el mal estado del suelo. El bando encarnado hizo dos tantos, apuntados por Neyra, muy bien ayudado por Padrós y Pi. El azul anotó un tanto gracias a Giralt, en combinación con Patoche, Luis y Celada. La directiva tiene el proyecto de celebrar un concurso en el mes de mayo».[1]
El primer partido que disputó el recién creado equipo tuvo lugar el domingo 9 de marzo de 1902, en las inmediaciones de la plaza de toros. Se formaron dos conjuntos de la propia asociación (uno portaba franja azul y otro roja).
La directiva comenzó enseguida a planear la celebración de un campeonato serio que enfrentase a varios clubs del ámbito nacional. Los trámites para lograr este objetivo irían avanzando, como así lo demuestra la cesión de un trofeo por parte del alcalde de Madrid, Alberto Aguilera.
«El alcalde de Madrid ha dado una copa de plata para premio en el concurso de foot-ball que se celebrará en mayo. Las bases del certamen las facilita la sociedad Madrid Foot-ball Club, en calle Alcalá, 48».[2]
Se sentaron las bases para el nuevo concurso y se logró la inscripción de los siguientes equipos: Club Bizcaya, Club Español de Foot-ball, Foot-ball Club Barcelona, New Foot-ball Club y Madrid Foot-ball Club.
«Para el concurso de foot-ball que se celebrará los días 13, 14 y 15 de mayo, están ya inscritos el Barcelona y Español (de la ciudad condal), el New y Madrid (de la capital), y Athletic y Vizcaya (de Bilbao). Hay gran expectación sobre todo por el Barcelona, que ha ganado la célebre copa Macaya, y el Vizcaya, que venció dos veces al Burdigala, de Burdeos. Los partidos de ensayo organizados ayer en el hipódromo por el Madrid Foot-ball Club entre éste y el New, estuvieron tan igualados que se saldaron con un empate a un tanto. Fueron presenciados por numerosa y distinguida concurrencia».[3]
La celebración del torneo coincidiría con el acceso al trono del rey Alfonso XIII, por lo que recibiría el nombre de Copa de la Coronación. En la semifinal, celebrada el día 13 de mayo de 1902, se enfrentaron Madrid y Barcelona. El primer clásico de la historia se saldó con la victoria del cuadro catalán – que integraba a seis jugadores extranjeros – por tres goles a uno. El tanto madridista fue obra del británico Arthur Johnson, que años más tarde se convertiría en técnico del club. Nacía aquel día una rivalidad que ya dura 117 años.
«Esta mañana ha comenzado en el hipódromo, en el campo que allí tiene la sociedad de polo, el concurso organizado por la sociedad Madrid Foot-ball Club. Numerosa concurrencia rodeaba el campo destinado al concurso, entre la que dominaba por el número el sexo bello, dignamente representado por hermosas mujeres que ocupaban la primera fila de la pista (…) después jugaron Barcelona contra Madrid. El primero de los bandos lo componían: Vicente Reig, Arthur Witty, José Llobet, Bartolomé Terradas, George Meyer, Miguel Valdés, Hans Gamper, John Parsons, Udo Steinberg, Luis de Asso y Alfonso Albéniz, con veinte suplentes. El segundo lo formaban: Juan Sevilla, Mario Giralt, Rafael Molero, José de Gorostizaga, Álvaro Spottorno, José Palacios, Arthur Johnson, José Giralt y Eustaquio Celada, con treinta y siete suplentes. Este partido, desde el principio, estuvo muy reñido, defendiéndose muy bien los madrileños contra los de Barcelona, que tenían considerable ventaja en facultades físicas y experiencia de juego. Jugadas las dos tantas, con el intermedio de unos minutos de descanso, quedaron el Barcelona con tres tantos y el Madrid con uno».[4]
Como puede apreciarse en la fotografía, el conjunto capitalino ya vestía una equitación de color blanco. Según parece, la influencia británica resultó decisiva en la elección de la elástica del equipo. De hecho, el londinense Corinthian Foot-ball Club, muy admirado por los hermanos Padrós, vestía de manera semejante.[5]
«El uniforme del club es blanco con banda morada, con el escudo de Madrid bordado en colores, y gorra y medias azules».[6]
Los madridistas se llevaron un gran chasco tras caer a las primeras de cambio en el torneo que ellos mismos habían organizado, que acabó llevándose el Club Bizcaya al día siguiente. Sin embargo, se tomaría la inesperada decisión de cerrar el evento futbolístico con la disputa de un trofeo de consolación entre el Madrid Foot-ball y el Club Español de Foot-ball.[7]
«A las nueve y media de la mañana, en el campo de juego del Madrid Foot-ball Club, se celebrará el concurso de la copa ofrecida por la Gran Peña. Se la disputarán el Madrid y el Español de Barcelona».[8]
El conjunto madridista disputaba la primera final de su historia el día 16 de mayo de 1902. Tras un reñido encuentro, los blancos se alzaron con el triunfo, al imponerse por tres goles a dos. Por desgracia, debido a la poca repercusión que tuvo el partido, desconocemos quiénes fueron los autores de los tantos que certificaron el triunfo del Madrid.
«El premio concedido por la aristocrática sociedad la Gran Peña a los organizadores del concurso nacional de foot-ball, se ha disputado ayer por la mañana en el campo del Madrid Foot-ball Club, inmediato a la plaza de toros. Dicho premio, que era una preciosa copa de plata, lo ha ganado el team del Madrid Foot-ball Club en reñida lucha con el team barcelonés El Español. Los jugadores madrileños hicieron tres goles por dos de sus adversarios. El partido fue presenciado por menos público que los anteriores, debido a lo poco que se había anunciado».[9]
El Madrid Foot-ball Club lograba alzarse con la primera copa de toda su historia. No obstante, este éxito tuvo un cierto sabor agridulce al tratarse de un trofeo de consolación. A pesar de todo, las sensaciones que dejó el primer gran evento futbolístico nacional fueron bastante positivas. Los partidos que se disputaron aquellos días levantaron gran expectación entre los madrileños (especialmente entre la alta aristocracia), estrecharon lazos entre los clubs más importantes del país y consolidaron el proyecto deportivo madridista.
Prueba de la extensión del fútbol entre la sociedad fue la creación de la primera Asociación de Clubs de Foot-ball de Madrid, el día 5 de diciembre de dicho año, bajo la presidencia de Carlos Padrós, cofundador del Madrid. Integraron esta nueva agrupación un total de siete equipos: Madrid, New, Español, Sport, Moncloa, Retiro y Moderno. Aquel mismo día se acordó la celebración de un nuevo torneo a nivel regional.
«Después del nombramiento de la junta, se acordó celebrar un concurso de bandas, que serán bordadas por distinguidas señoritas, y destinar cuatro premios a los cuatro primeros equipos que obtengan mayor número de puntos».[10]
El Madrid Foot-ball Club cerraba su primer año de historia disputando una serie de partidos con otros equipos de la recién creada federación madrileña. El balance de la temporada fue muy positivo, ya que se evidenció la extensión del fútbol entre la sociedad española y se fueron consolidando varios equipos a lo largo y ancho del país. Al año siguiente, se disputaría la primera Copa de S. M. el Rey de la historia.
[5] G. Mandis, S. (2016). The Real Madrid way. How values created the most successful sports team on the planet (p. 49). Dallas: Benbella.