Oiga, que él no tuvo la culpa.
De José López CarreñoJugar un Mundial de fútbol es para elegidos, pero disputar cinco consecutivos significa entrar directamente en su historia. Este honor únicamente lo han logrado hasta ahora dos jugadores, uno de ellos, Antonio Félix Carbajal Rodríguez, portero de la Selección Nacional de México.
Carbajal, conocido en el mundo del fútbol como “Tota” cuyo apodo le viene de su infancia cuando no podía todavía pronunciar Toño y acertaba a decir “Tota”, o “Cinco Copas”, por razones evidentes, nació en León (México) el 7 de junio de 1929.
En sus primeros tiempos de aficionado al fútbol, siendo niño, nuestro protagonista jugaba de delantero, si bien, el fallecimiento de un hermano, atropellado en la calle, motivó que su padre le prohibiera jugar al fútbol. Por ello, Carbajal trataba de jugar de portero haciendo de marco la puerta de su casa con lo cual cuando su padre aparecía por allí, él podía disimular haciendo como que contemplaba el partido de los amigos como un espectador.
Se formó en los equipos inferiores del Oviedo, que era un club de raíz española que estaba ubicado en la capital federal, pasando posteriormente al Real Club de España donde coincidió con Gaspar Rubio, que había sido delantero del Real Madrid. Más tarde fichó por el Club León donde estuvo jugando hasta su retirada de los campos de juego pasando a ser entrenador del mismo.
Pronto fue seleccionado para disputar la Olimpiada de Londres celebrada en 1948, aunque el único partido que disputó México trajo como consecuencia su eliminación al perder con Corea por 5 a 3 el dos de agosto de 1948. Carbajal fue suplente, actuando como titular su compañero Quintero.
Como decíamos al principio, Carbajal es protagonista por derecho propio por disputar cinco Mundiales, es decir, competir al máximo nivel durante la friolera de 20 años. Únicamente, otro jugador ha disputado tal número de Mundiales: Lothar Matthaeus (Alemania) en 1982, 1986, 1990, 1994 y 1998, jugando partidos en cada uno de ellos.
Pero lo particular de nuestro invitado es que en los Campeonatos Mundiales en los que participó (1950, 1954, 1958, 1962 y 1966), jugó 11 partidos y únicamente su selección ganó uno de ellos. Se ha leído muchas veces, como curioso dato de los Mundiales, que Carbajal ha pasado a la historia por esta circunstancia, pero hay que afirmar que él no jugaba solo, por lo que estimamos que no puede atribuírsele tal cúmulo de adversidades dado que, es obvio, actuaban otros diez compañeros con él.
Para el Mundial de Brasil de 1950 fue seleccionado para actuar como arquero titular. México disputó estos encuentros:
El 24 de junio, derrota ante Brasil por 0 a 4. Fue el partido inaugural del Campeonato, pero no hubo color en el desarrollo del mismo. En Maracaná (Río de Janeiro) Brasil pasó por encima de México. Carbajal recibió dos goles de Ademir (que luego sería el máximo goleador de la competición), Jair y Baltazar.
Cuatro días más tarde, de nuevo derrota ante Yugoslavia por 4 -1; y el dos de julio, el tercer partido perdido, esta vez, ante Suiza por 2 -1.
En 1954, México logra clasificarse nuevamente para disputar la Copa del Mundo que se celebra en Suiza, debutando ante Brasil el 16 de junio. Pinga, con dos goles, Baltazar, Didí y Julinho redondean una derrota por 5 a 0, aunque esta vez el portero mexicano fue Mota.
Tres días después, ante Francia, Carbajal sí actúa. Después de ir perdiendo por dos a cero, logran empatar a dos en el minuto 85 de juego, pero Kopa, en el minuto 88, de penalti señalado por el árbitro español Asensi, logra la victoria para los galos.
En 1958 el Mundial se celebra en Suecia. El primer encuentro lo disputan ante los anfitriones el 8 de junio. Otra vez se trata del partido inaugural. Carbajal va a disputar su tercer mundial consecutivo, ya como capitán de su selección. Suecia contaba con un extraordinario plantel en sus filas: Hamrin, Liedholm, Gren, Skoglund y Simonsson. Éste último, más tarde se convertiría en jugador del Real Madrid, aunque sólo disputó tres partidos de Liga marcando un gol. El resultado, nuevamente, es de derrota, esta vez, por 3 a 0.
El segundo encuentro que disputa México, por fin, se logra un empate a un gol ante la selección de Gales. La selección galesa fue ganando el partido desde el minuto 32, empatado los mexicanos en el último minuto del encuentro por obra del extremo derecho Belmonte.
Y de nuevo, el 15 de junio, se produce otra derrota más, esta vez ante Hungría por 4 goles a 0, y eso que la potente selección húngara estaba ya muy devaluada por las fugas de sus mejores jugadores a países de Europa occidental.
Como si de una maldición se tratara, en el siguiente Mundial celebrado en Chile en 1962, se debuta otra vez ante Brasil, vigente campeón del Mundial anterior. Y nueva derrota, esta vez por 2 a 0, con goles de Zagalo y Pelé.
En su segundo partido, ante España, en encuentro celebrado el 3 de junio, Carbajal se llevaría un gran disgusto. Faltaban treinta segundos para finalizar el encuentro cuando Peiró marcó el gol del triunfo. La imagen de Carbajal llorando junto al poste de su portería todavía se recuerda. Los datos de aquel encuentro fueron:
En el Estadio de Sasualito, de Viña del Mar, a las órdenes del árbitro Branko Tesanic (Yugoslavia), los equipos nacionales formaron así:
España: Carmelo; Rodri, Santamaría, Gracia; Vergés, Pachín; Del Sol, Peiró, Puskas, Luis Suárez y Gento (capitán). Por parte de Méjico actuaron Carbajal (capitán); Del Muro, Sepúlveda, Jáuregui; Cárdenas, Nájera; Del Águila, Reyes, H. Hernández, Jasso y Díaz.
El último partido del Mundial de 1962 lo disputaron ante Checoslovaquia. Por fin se consiguió la primera victoria en una Copa del Mundo para México y para Carbajal. Se ganó a los checos por tres goles a uno. Checoslovaquia quedaría subcampeona del Mundo al perder por 1 a 3 en la Final disputada ante Brasil.
Llegamos al Mundial de Inglaterra de 1966. Carbajal va convocado con su selección pero como suplente de Calderón. Se comienza empatando a un gol ante Francia el 13 de julio. Esperanzador, si bien Carbajal no disputa este encuentro ni el siguiente ante Inglaterra donde México vuelve a perder por 2 a 0, con goles de Bobby Charlton y Hurts. Como saben, Inglaterra ganó este Mundial en una polémica final ante la República Federal de Alemania.
Y el 19 de julio, Carbajal, ya con 37 años, debuta en su quinto y último Mundial ante Uruguay en el estadio de Wembley. Ya sin ninguna posibilidad de clasificación para la siguiente fase, el resultado fue de empate a cero. Carbajal logró mantener su portería imbatida.
Carbajal debutó en un Mundial en Maracaná y se despidió en Wembley. No habrá muchos que puedan decir lo mismo.
Carbajal era un portero supersticioso. Una de sus manías la tuvo con la camiseta interior con la que disputaba los partidos, no con el jersey del equipo. Siempre jugaba con la misma camiseta. Obviamente, su color inicial esmeralda, fue pasando con el tiempo por una amplia gama difuminada de colores…Se cuenta que también al salir al terreno de juego, iba botando un balón desde el vestuario hasta el centro del campo y desde allí hasta la portería que tenía que defender. Al llegar allí, golpeaba el poste cinco veces, saltaba cinco veces al larguero, y daba otros cinco golpes al poste contrario. Después exclamaba “¡Que empiece el partido!”. Otra más, debajo de las medias llevaba otras dos, una de color negro y otro de color blanco.
Carbajal, en sus 5 Mundiales, jugó 11 partidos, con un total de 1 victoria, 2 empates y 8 derrotas, recibiendo 25 goles. Como ya hemos indicado, la culpa no fue sólo suya, tenía otros diez compañeros sobre el terreno de juego.
De todas maneras, ante este – se puede decir – deficitario balance, cuántos quisieran poseer tal curriculum mundialista.
Fue elegido como el mejor portero de la CONCACAF del siglo XX, y distinguido con la Orden al Mérito del Centenario F.I.F.A..
Carbajal, ahí queda eso.