La era dorada del C.E. Sabadell (1965-1972). Segunda parte
De Fernando Cuesta Fernández
TEMPORADA 68-69: UN HISTÓRICO CUARTO PUESTO
Martínez, Echevarría, Comas; Isidro, Pini, Arnal, Romero, Diego; Marañón, Torrent, Muñoz, Frigols; Ortuño, Montesinos, Vidal I, Garzón, Pujol, Latorre, Seminario y Zaballa. Estos son los hombres con los que va a contar Pasieguito para una nueva campaña luchando en la máxima categoría del fútbol español. Las principales novedades las constituyen la marcha de Vall, que retorna al Español tras su larguísima cesión, y la de Antoni Vidal, fichado por el Real Madrid, así como la retirada del gran capitán Ángel Sertucha, el central que jugaba con un pañuelo anudado a la frente ( que recibe un merecidísimo homenaje el 27 de octubre de 1968, en un partido amistoso contra el Athletic de Bilbao, con triunfo rojiblanco por 1 a 4 ) y también la de Casado. Igualmente Camps pasa al Mallorca, equipo donde el buen extremo colgará definitivamente las botas. Por contra, ingresan en el club dos jugadores de procedencia levantina: el veterano lateral valenciano Alberto Arnal, con muchas temporadas de experiencia con los de Mestalla, y el joven interior del Onteniente, flamante Segunda División, José Luís Garzón. También regresa Romero, cedido el último año al Xerez, y además, las proverbiales buenas relaciones existentes entre Barça y Sabadell vuelven a dar sus frutos, con el traspaso definitivo de Torrent, y la cesión de Pujol y Lluis Vidal, el hermano mayor del ahora jugador madridista.
Los arlequinados inician la liga con muy buen pie, victoria en Los Cármenes sobre el recién ascendido granada, mediante un gol de Garzón. Y a la siguiente jornada incluso se colocan como provisionales líderes del campeonato -igualados con Real Madrid y UD. Las Palmas- tras vencer en la Nova Creu Alta al Real Zaragoza con un solitario tanto de Torrent. Ya no volverán a abandonar los primeros lugares, mostrándose muy seguros en su propio terreno – con la única excepción de una derrota ante el Atlético de Madrid -, y finalizando la primera vuelta con 15 puntos y un positivo. Pero en la segunda ronda conseguirán mejorar aun ese resultado, y el cuadro lanero va a acabar en cuarto lugar, tras Real Madrid, Las Palmas y Barcelona ( y por encima de clubes mucho más poderosos como Atlético de Madrid, Valencia, Real Zaragoza o Athletic de Bilbao ), con 32 puntos y dos positivos y un excelente balance de 10 victorias, 12 empates y solamente 8 derrotas, con 33 goles a favor y 34 en contra, posición que les da derecho a tomar parte en la Copa de Ferias la siguiente temporada. Garzón, con 9 tantos, y Pujol con 8, fueron los máximos goleadores del cuadro de Pasieguito, que una vez más fue ratificado en el banquillo, demostrando los buenos frutos que pueden dar la confianza y la continuidad. El equipo se había hecho fuerte en la Nova Creu Alta, donde había conseguido 22 puntos, cediendo únicamente seis empates y una sola victoria visitante, mientras que a domicilio había obtenido 10 puntos, con dos triunfos y seis igualadas. El Sabadell era en aquel momento el segundo club catalán, ya que el RCD. Español, con una plantilla impresionante – Osorio, Mingorance, Lico, Glaría, Amas, Marcial, Re, Rodilla o José María – , acababa de descender a Segunda División por segunda vez en toda su historia.
Lamentablemente, y dado su excelente rendimiento, el Barça va a repescar a Lluís Pujol ya para el torneo de Copa ( a la vez que renunciaba a sus derechos sobre el otro Lluís, Vidal, cuyo desempeño durante la temporada no había pasado de discreto ). Al mismo tiempo se especulaba acerca del posible interés del club azulgrana por Fernando Ortuño, jugador que había destacado en el tercio final de la competición liguera, llamando la atención de los principales clubes españoles, pero finalmente el joven delantero oriundo de Granollers va a continuar en las filas arlequinadas, donde ya se consagrará definitivamente en la siguiente temporada.
TEMPORADA 69-70: UN PASEO POR EUROPA Y SALVADOS POR LOS PELOS
De cara al curso 69-70, con la aventura europea como gran novedad, el C.E. Sabadell se refuerza con un par de jugadores veteranos pero de talla internacional. Estamos refiriéndonos al bilbaíno Luís Aguirre y al ex-barcelonista Chús Pereda, dos nombres ilustres del fútbol español de la época. También causa alta el joven Cristo, un prometedor extremo procedente del Real Betis Balompié, así como Palau, que retorna a su club de origen después de una experiencia no demasiado positiva en Can Barça. Por el contrario, son baja Echevarría, Frigols, Latorre y Seminario, quien tras una década en el fútbol europeo, regresa a su Perú natal. De modo que la plantilla arlequinada va a quedar formada por los siguientes hombres: Martínez, Comas, Nicolau; Isidro, Pini, Arnal, Muñoz, Diego, Camps II, Romero, Farrás; Marañón, Torrent, Montesinos, López; Zaballa, Pereda, Aguirre, Ortuño, Garzón, Cristo, Vidal I y García.
La temporada arranca muy positivamente, y al finalizar la tercera jornada el Sabadell es segundo en la tabla, empatado a puntos con el líder Athletic de Bilbao y con el Real Madrid. Y tampoco le van nada mal las cosas en su debut en competición europea, pues consigue un esperanzador resultado en el partido de ida de los treintaidosenos de final de la Copa de Ferias, al derrotar al Brujas belga por 2 a 0 en la Nova Creu Alta. Tan histórico encuentro se disputó el día 17 de septiembre de 1969, y los pupilos de Pasieguito presentaron la siguiente alineación: Comas; Isidro, Pini, Arnal; Montesinos, Muñoz; Zaballa, Pereda, Palau, Garzón y Cristo. Los tantos fueron conseguidos uno en cada tiempo, el primero por Zaballa a los 38 minutos de juego, y el segundo y definitivo por Cristo, en el minuto 86 de partido. Sin embargo, en la devolución de visita a la preciosa ciudad flamenca, los laneros van a pagar la novatada, y serán aplastados por los locales con un concluyente 5 a 1, que pone un abrupto final a su aventura europea. Palau hizo el gol del honor en el minuto 59 -que supuso el momentáneo 4 a 1 – y el Sabadell presentó el siguiente once: Comas; Isidro, Pini, Arnal; Marañón, Muñoz ( Romero ); Ortuño, Montesinos, Palau, Garzón y Zaballa.
Y también, a partir de la cuarta jornada liguera, el conjunto arlequinado va a entrar en una dinámica negativa que le llevará muy cerca de los puestos de descenso ( en esta temporada, concretamente, los tres últimos de la clasificación final ). De dicha zona de peligro le sacarán los dos resultados con los que concluye la primera vuelta: una victoria sobre el Sevilla en la Nova Creu Alta, y sobre todo un inesperado triunfo en el propio terreno del líder, el Atlético de Madrid, con un solitario gol de Vidal que fue como un auténtico regalo de Navidad para la afición arlequinada ( el partido se jugó el día 21 de diciembre ) y que les dejó, en el ecuador de campeonato, en la décima posición, con 14 puntos y dos negativos, abriendo una considerable brecha con respecto a los ya casi desahuciados Pontevedra y Mallorca, aunque la tercera plaza de descenso se preveía que iba a estar muy reñida. Y es que aquellas navidades del 69 fueron especialmente felices para los habitantes de la industriosa ciudad lanera en general, y los seguidores arlequinados en particular, con una verdadera lluvia de millones, puesto que en el sorteo extraordinario de la Lotería Nacional, celebrado el día 22 de diciembre, resultó premiado con el «Gordo» el número 59.536, cuyas doce series habían sido vendidas íntegramente en Sabadell, y en concreto en la Administración número 3. El número fue adquirido por el tesorero de la Peña Futbolística Arlequinada, y estaba muy repartido entre sus socios y simpatizantes.
La segunda vuelta va a traer dos triunfos de prestigio en la Nova Creu Alta, de esos que convierten a un equipo pequeño en «matagigantes». El primero se consigue al derrotar al Barça por 3 a 2, con dos goles y una magnífica actuación del veterano Marañón, tras remontar un 0-2 adverso, y el segundo, el 1 de marzo de 1970, es una goleada histórica sobre el Real Madrid – al que los arlequinados no vencían desde la temporada 1946-47 -, que cae por tres a cero, con goles de Marañón, Garzón y Ortuño. Esta fue la alineación que puso en liza Pasieguito en tan señalada jornada: Martínez; Isidro, Pini, Arnal; Montesinos, Marañón; Ortuño ( Cristo ), Romero ( Torrent ), Vidal I, Garzón y Palau. Tras este resultado el Sabadell parecía tener ya definítivamente asegurada la permanencia, un año más, pero ya no volverá a ganar otro partido, y a cada semana iría perdiendo gas, hasta el punto de llegar al último encuentro, en su propio feudo y ante un Atlético de Madrid que se jugaba nada menos que el título, salvado por los pelos, a pesar de que ganaron todos sus rivales directos ( y los laneros perdieron ante los colchoneros, que se proclamaron campeones ), gracias a su mejor «goal average» particular con el Deportivo de La Coruña, finalmente descendido. El balance del conjunto vallesano quedaba como sigue: 10 victorias, 5 empates y 15 derrotas, con 31 goles a favor y 37 en contra, y un total de 25 puntos y 5 negativos, lo que le suponía ocupar la decimotercera posición.
Tras una campaña 68-69 muy tranquila, habían vuelto de nuevo los apuros. Pero el presidente Rossón tenía un plan que tal vez podía significar una buena dosis de seguridad para su equipo, la ampliación de la Primera División de 16 a 18 equipos, algo que finalmente el Pleno de la Federación Española de Fútbol va a aprobar para que entre en vigor en la temporada 1971-72. A más equipos, mayores posibilidades de que los que ya están dentro puedan permanecer. Pero dejemos el fútbol de los despachos y regresemos al fútbol que se juega sobre el césped… El curso 69-70 va a completarse con la disputa de una nueva edición de la «Copa del Generalísimo», y en dieciseisavos el Sabadell se deshace sin demasiadas dificultades del Mestalla, filial valencianista, tras una derrota por la mínima en la ciudad del Turia ( 1 a 2 ), y un claro triunfo en la Nova Creu Alta ( 3-0 ). En octavos el rival a batir va a ser la Real Sociedad ( 2 a 0 para los locales en Sabadell, y 1 a 0 para los donostiarras en el viejo Atocha ). Pero en cuartos, el Athletic de Bilbao va a ser ya un obstáculo insalvable, pues los leones remontarán en San Mamés, con un ajustado marcador de 2 a 0, la desventaja que se traían de la Nova Creu Alta, donde habían sido doblegados por 2 goles a 1.
TEMPORADA 70-71: UN CURSO GRÍS
La última temporada con sólo 16 equipos en Primera la afronta el Sabadell con el mismo equipo a los mandos – Rossón y Pasieguito -, y un puñado de novedades en la plantilla. Vienen Martín, Taulats, Jenaro, García Soriano, Quiles, De Diego, Otiñano, Rodri, el paraguayo Jara, y regresa de su decepcionante periplo por el Real Madrid Antoni Vidal, -que dada la presencia en el equipo de su hermano mayor Lluís pasará a ser conocido como «Vidal II» -, y se van Diego, Camps II, Farrás, García y dos jugadores importantes en la última campaña, el defensa Romero y el delantero Ortuño, traspasados a Barcelona y Real Madrid respectivamente. En teoría la plantilla no debería resentirse de la marcha de estos dos últimos para «hacer caja». Llama la atención la presencia de nada menos que seis jugadores procedentes de la región valenciana: Martínez, Martín, Arnal, Jenaro, Garzón y Quiles. Estos son los efectivos con los que Pasieguito trataría de conseguir la permanencia, un año más: Martínez, Comas, Nicolau: Isidro, Pini, Arnal, Martín, Torrent; Taulats, López, Jenaro, Montesinos, Marañón, Garzón; De Diego, Quiles, , Palau, García Soriano, Cristo, Vidal I, Vidal II, Otiñano, Rodri y Jara.
Al producirse la ampliación de la categoría en la campaña siguiente, tan sólo van a descender a Segunda dos equipos, ascendiendo cuatro. Y desde bastante temprano Elche y Zaragoza, tal vez un tanto sorprendentemente a la vista de su historial anterior, ocuparán los dos últimos puestos. La trayectoria del cuadro arlequinado, por consiguiente, no va a tener demasiados sobresaltos por ese motivo, aunque en absoluto puede considerarse como buena, pues al final va a sumar tan sólo 21 puntos, el registro más pobre desde que regresara a la División de Honor en 1965, ocupando por segundo año consecutivo la decimotercera posición. 8 triunfos, 5 partidos terminados en tablas y 17 derrotas, con sólo 28 goles a favor y la friolera de 49 en contra, no eran en absoluto unos buenos números, a pesar de haber vuelto a salvar la categoría. El guipuzcoano Rafael De Diego, que había llegado procedente del Real Madrid ( y que años más tarde fallecería prematura y trágicamente en la localidad asturiana de Luanco, a consecuencia de una explosión de gas ), fue el artillero más destacado de los laneros, obteniendo 9 dianas.
Tal vez la nota más positiva de toda la temporada – al margen de conseguir nuevamente la permanencia – fue lograr un nuevo triunfo en la Nova Creu Alta sobre el gran y poderoso rival regional, el Barça. Sucedió en la jornada número 19, el 24 de enero de 1971. Marcó primero Garzón en el minuto 34, empató Rexach para los azulgranas en el 49, y en el 68 de nuevo Garzón hizo subir al marcador el resultado que ya sería definitivo. Esta fue la alineación arlequinada: Martínez; Martín, Pini, Arnal; Montesinos, Marañón; García Soriano ( Palau ), Jenaro, De Diego, Garzón y Quiles. En las filas del equipo iba produciéndose la natural renovación, pues desaparecían veteranos como Isidro ( que al final de la campaña se retiraría del fútbol, y muy pronto se vería aquejado de graves problemas en la vista ), y les sustituían jóvenes como Martín, García Soriano, Jenaro o Quiles.
Muy decepcionante va a ser el breve paso del Sabadell por la «Copa del Generalísimo», ya que será eliminado a las primeras de cambio por un equipo de Segunda División, el Club Deportivo Logroñés, para más «inri» recién ascendido a la categoría de plata del fútbol español. En la Nova Creu Alta vencieron los de Pasieguito por un escuálido 1 a 0, para caer en Las Gaunas por 2 a 0. El resultado no hacía presagiar nada bueno de cara a la siguiente campaña, un presentimiento negativo que el traspaso al Sevilla de las dos máximas figuras del equipo ( al menos en lo tocante a la efectividad goleadora ), De Diego y Garzón, no hacía sino acentuar. La incertidumbre, una vez más, iba a ser inseparable compañera de la fiel afición arlequinada.
TEMPORADA 71-72: AMARGO DESPERTAR DE UN HERMOSO SUEÑO
La Primera División del fútbol español estrena su nuevo formato, con 18 equipos y el correspondiente incremento de fechas, y posiblemente también de recaudaciones. En Sabadell se confía en no sufrir los apuros de las dos últimas campañas, pero todo el mundo reconoce que aun así la papeleta se presenta complicada. Algunos nombres ilustres como Isidro – al que se le tributa también un merecido homenaje con un partido frente a la Unión Española de Chile – o Torrent abandonan el equipo, al retirarse de la práctica activa del deporte. Les acompañan en su adiós Comas, Nicolau, López y Rodri, más los dos valiosos elementos traspasados al Sevilla, De Diego y Garzón, algo que ya se estaba volviendo habitual para cuadrar el presupuesto al final de cada ejercicio. Son nuevos, el guardameta Irazusta, casualmente sobrino de Pasieguito, el barcelonista Franch – del que se espera que pueda cubrir dignamente la ausencia de Isidro -, Catalán, Piñel, Moya, el valencianista Vilar (teórico sustituto de Torrent ), Castellanos, Burgos, y finalmente un par de jugadores con vitola internacional: el navarro Zaldúa, tras diez temporadas en el Barça, y el paraguayo Jara, procedente del Valencia, que se va a encontrar en la plantilla lanera con otro compatriota de su mismo apellido. Estos son los mimbres de que dispone el ya veterano ocupante del banquillo de la Nova Creu Alta para intentar hacer un buen cesto: Irazusta, Martinez; Martín, Franch, Pini, Catalán, Vilar, Romero, Piñel, Arnal, Moya; Jenaro, Montesinos, Marañón, ,Taulats, López, Castellanos; Zaldúa, Quiles, Cristo, Jara I, Vidal I, Garcia Soriano, Palau, Burgos, Otiñano, y Jara II
La temporada 71-72 empieza mal, pero va a aun acabar peor. En el primer compromiso liguero el Sporting de Gijón se llevará los dos puntos del feudo vallesano. Esta fue la alineación que actuó en el estreno oficial de la temporada, aquel 5 de septiembre de 1971: Martinez; Franch, Pini, Martín; Catalán, Marañón; Jara, Montesinos, Zaldúa, Jenaro ( Palau ) y Quiles ( Cristo ). El siguiente partido es una visita al Vicente Calderón, donde el Atlético de Madrid aplasta a los arlequinados con un contundente 5 a 0, de modo que al final de la segunda jornada van a ostentar el farolillo rojo. Tres victorias ante el Betis, Deportivo de La Coruña y Burgos les permiten respirar un poco y salir provisionalmente de los puestos de peligro en la jornada número 12, pero a partir de dicho momento enhebrarán una serie de resultados negativos ( seis encuentros consecutivos sin conocer la victoria ), que van a situarlos nuevamente a la cola de la clasificación, lugar que prácticamente ya no abandonarán hasta el final del campeonato.
Una sorprendente victoria ante el Atlético de Madrid ( 3 a1 en la Nova Creu Alta, con goles de Franch, Jara II y Cristo ) les da un poco de aire, pero tras una nueva derrota en su propio feudo ante el Real Madrid, en la jornada 22, ya van a ocupar en propiedad la última posición, hasta el momento en que se produzca el descenso matemático, varias jornadas antes de concluir la competición. Restando unos pocos partidos, y como prueba de buena vecindad, el Barcelona va a cederle al Sabadell a su antiguo jugador Romero, dado que el nuevo técnico blaugrana, el holandés Rinus Michels, no contaba con él, pero evidentemente su concurso no será suficiente para enderezar el rumbo de una nave que se iba a la deriva. El 14 de mayo de 1972 el C.E. Sabadell, tras siete inolvidables años en la élite, se va a despedir de la Primera División para una larga temporada. Y lo va a hacer con una derrota en la Nova Creu Alta ante la Unión Deportiva Las Palmas por 0 a 1, y con la siguiente alineación: Martínez; Franch, Vilar, Arnal; Montesinos, Romero; García Soriano, Jenaro, Vidal I ( Cristo ), Palau y Quiles. El cuadro catalán había sumado únicamente 23 puntos, que se desglosaban en 7 victorias, 9 empates y 18 derrotas, con 27 goles a favor y 52 en contra, un balance en verdad paupérrimo.
Para poner el colofón a tan nefasta temporada, los de Pasieguito van a ser eliminados de la Copa nuevamente a las primeras de cambio, y otra vez por un equipo de Segunda División, en este caso el Pontevedra, pues a pesar de vencer los laneros en Pasarón por 0 a 1, en la devolución de visita los gallegos se impondrán por 0 a 2. Se abría así una nueva etapa en la historia del club arlequinado, una etapa en la que ya no iba a estar dirigido ni por Ricardo Rossón – aunque este continuaría aun en el cargo una temporada más – ni por Pasieguito. Entre 1972 y 75 va a militar en Segunda División, descendiendo a Tercera en esa última fecha. Permanecería allí durante un par de temporadas, para retornar a la categoría de plata – ahora denominada «Segunda A» en 1977, manteniéndose en ella hasta 1983. Una campaña en Segunda B, la 83-84, sería el prólogo de otra fase brillante en la historia del club lanero, aunque en esta ocasión bastante más breve. Tras actuar dos años en Segunda A, el C.E. Sabadell asciende a Primera División en 1986, con un equipo del que forman parte jugadores como Capó, Lino, Serrat, Perico Alonso, Joaquín Villa, Merayo o Nacho. Dos temporadas entre los grandes, nuevo descenso a Segunda A, para caer hasta Tercera por deudas en 1993-94, jugar la mayor parte del tiempo en Segunda B, y por fin regresar a Segunda A en 2011, categoría en la que milita actualmente.
El balance de estas siete campañas consecutivas en Primera División, entre 1965 y 1972, se sustancia en 214 partidos disputados, con 66 victorias, 48 empates y 100 derrotas, marcando 218 goles y encajando 307. El cuadro lanero había ido formando cada temporada su respectiva plantilla a base de retales, haciendo honor a la especialización textil de su ciudad, con jugadores desechados por equipos grandes ( se le podría comparar con el famoso «Salón de los rechazados», aquella exposición que se celebró en París en el año 1863 y en la que colgaron sus cuadros los pintores impresionistas, al margen de los canales oficiales del arte de su época ), puesto que se van a vestir de arlequinados muchos jugadores que eran descartados por clubes como el Barcelona, Real Madrid, Valencia o Athleic de Bilbao. La mayoría venían con denominación de origen blaugrana ( Torrent, Marañón, Comas, Montesinos, Zaballa, Seminario, Lluís Vidal, Palau, Pereda, Franch, Zaldúa…), pero los había también con pasado merengue ( Isidro, Casado, De Diego… ), valencianista ( Martínez, Cabello, Arnal, Jara, Vilar…) o rojiblanco ( Sertucha, Izaola, Latorre, Mauri… ). Lo que apenas sí hay son canteranos catalanes, pues el Barça se llevaba a casi todos los jugadores que despuntaban en la región ( como, por ejemplo, un oriundo de la misma Sabadell, el lateral izquierdo internacional Eladio Silvestre ). Una experiencia futbolística, por lo tanto, de lo más meritoria, compitiendo con los grandes sin un elevado presupuesto, apostando por la continuidad en la dirección técnica, y haciendo siempre de la necesidad virtud.