El Fútbol en la Exposición Regional de Valencia de 1909
De Luis Javier Bravo MayorComo toda Feria de Muestras que se precie la celebrada en Valencia entre los días 22 de mayo y 22 de diciembre de 1909 fue una Exposición donde se intentó mostrar al público todos aquellos avances dados en las diferentes ramas que mueven la economía o la cultura mundiales.
La organización corrió a cargo del Ateneo Mercantil de Valencia, el cual era presidido en esos instantes por el Sr. Marqués del Turia, D. Tomás Trénor.
El lugar escogido para instalar el recinto ferial a día de hoy lo ocupa el final de la Alameda de Valencia, frente a la fábrica de tabacos. En su momento fueron 16 hectáreas ocupadas por pabellones y edificios.
La ceremonia de inauguración fue el 23 de mayo de 1909 asistiendo S.M. El Rey D. Alfonso XIII y el jefe de Gobierno D. Antonio Maura.
La electricidad, los motores de explosión, la aerostación, el fonógrafo, el cine, la industria en general y el ocio fueron el motor impulsor de la Exposición y, claro, el fútbol estaba allí. Y para que todos estos adelantos pudiesen ser observados y disfrutados se realizaron una serie de construcciones sin parangón en esos momentos en la ciudad. Un parque de atracciones, un palacio de congresos, un auditorio de música, un palacio de la ópera, un casino, un museo de ciencias, un centro de exposiciones y…un estadio deportivo.
Para hacer uso de este Estadio se celebraron una serie de competiciones deportivas como carreras ciclistas, pruebas atléticas y football.
Para el Concurso de football hubo bastante interés pues los conjuntos valencianos, dado que competirían clubes de otras regiones, debieron jugar una fase previa donde tan solo uno de ellos se clasificaría. Los clubes valencianos interesados en participar fueron el Valencia (no el actual), el Alicante y el Cabañal.
La eliminatoria se desarrolló del siguiente modo:
El día 25 de junio disputaron el primer partido los equipos del Valencia y el Alicante, venciendo los primeros por siete goles a cero, uno de ellos conseguido antes del descanso.
Valencia.- Morris; Estévez, Sinisterra; Prats, Ferrer, Torres; Correll, Miquel, Reberg, Payre y Escribá.
Alicante.- Iborra; Rodrigo, Lamaique; García, Menoyo, Carratalá; Álvarez, Ramón, De Elizaire y Vera.
Árbitro.- Sanz.
Al día siguiente, 26 de junio, Valencia y Cabañal disputan la segunda semifinal, llegando a jugarse tan solo 30′, dándose como vencedor al Valencia por tres goles a cero.
Valencia.- Morris; Estévez, Senisterra; Prats, Ferrer, Torres; Correll, Miquel, Reberg, Payre y Escribá.
Cabañal.- Martín; García, Julio Valiente; Francisco Valiente, Sinisterra, Fuentes; Ferrandis, Ángel Fernández, Luis Fernández y Ochando.
Tras este encuentro Alicante y Cabañal disputaron otro que duró una hora y en el cual quedaron empatados.
Una vez conseguida la clasificación por parte del Valencia ya se pudo comenzar el Concurso.
El día 27 y ante un enorme gentío comenzó la disputa de la Copa de la Exposición, toda ella de plata, con un primer plato fuerte que protagonizaron los dos rivales barceloneses, Barcelona y Español.
Las alineaciones presentadas fueron las siguientes:
Por el Barcelona.- Solá; Brú (capitán), Thalmann; Morris, Peris, Grau; Foros, Buchlein, C. Comamala, Steinberg y A. Comamala.
Por el Español.- Gibert; Irizar, Martí; Baró, Sampere, Soler; Oliver, Ponz (capitán), Casellas, Graells y Oliver.
Raga actuó como árbitro.
Dos goles a uno finaliza la primera parte a favor del Barcelona anotando un gol más cada equipo en la segunda, finalizando 3-2 favorable al Barcelona.
Una vez finalizado el partido el Español presenta una queja formal al Comité organizador por lo que ellos consideran parcialidad de los jueces de campo y de meta. El Comité acepta la protesta y dice que la estudiará. No volvemos a tener noticias del asunto.
El día 29 juegan Valencia y Español venciendo los catalanes por cuatro goles a tres.
El otro partido que debía jugarse este mismo día solo pudo hacerse hasta el descanso tras empatar sin goles la Gimnástica madrileña y el Barcelona. La Gimnástica acudió al Concurso con refuerzos del Español de Madrid. Las formaciones presentadas por ambos equipos fueron las siguientes:
Barcelona.- Solá; Brú (capitán), Thalmann; Morris, Peris, Grau; Foros, Buchlein, C. Comamala, Steinberg y A. Comamala.
Gimnástica.- Lemmel; Carruana, Méndez; Yarza, Navarro, Baonza; Rodríguez, Morales, Neyra, Zahera y Navarro.
Arbitró Martí, del Español.
Ante la reclamación de la Gimnástica de que en breve tiempo no habrá luz y no se podrá acabar el partido el Barcelona no es de la misma opinión, así como el árbitro que decide que se siga jugando. Continuando con la disputa pasa el tiempo y se hace de noche. Comienza la segunda parte y a los 5′ el Jurado decide que se continúe jugando al día siguiente.
El día 30 comienza la segunda parte. A pesar del cansancio que muestran los madrileños, en un córner consiguen su primer y único tanto poniéndose por delante en el marcador gracias a un autogol de Thalmann. Nada más sacar de centro el Barcelona anota el empate. Faltando diez minutos Buchlein consigue el segundo tanto azulgrana con el pecho aunque la Gimnástica, una vez finalizado el partido reclama al Jurado que fue con las manos. El Jurado pregunta al árbitro y jueces de línea que le confirman que se produjo con el pecho con lo cual le dan la victoria al Barcelona. Lemmel firmó el acta y felicitó al capitán barcelonista por el triunfo.
El siguiente partido es el que disputan, bajo la atenta mirada de S. A. la Infanta Doña Isabel, los clubes Valencia y Barcelona. Es la final.
El Valencia se ve reforzado por un delantero y en el Barcelona Sans sustituye a Grau que debió volver a Barcelona.
Sanz, del Valencia, actuó como árbitro.
Sin abandonar el terreno de juego valencianista durante todo el partido el Barcelona se proclama vencedor tras conseguir cuatro goles por ninguno del Valencia. Tras esta victoria el Barcelona consigue alzar la Copa de plata. Hubo vítores barcelonistas a la Infanta, Valencia, Madrid y Barcelona.
En el último encuentro que se disputó venció la Gimnástica por tres goles a cero al Español, actuando Latorre como árbitro.
De todo aquello quedan una serie de edificios, el himno de Valencia, el fútbol y la vieja rivalidad barcelonesa.
¡Ah! Y después de 100 años supongo y deseo que también la Copa en el museo del Barça.